Desde el lecho marino hasta la Luna y Marte, nuestros lubricantes de calidad espacial ayudan a dar forma al futuro de la exploración espacial y hacen avanzar a la humanidad en nuestro planeta Tierra.
Castrol lleva más de un siglo a la vanguardia de la innovación, desarrollando productos avanzados con tecnologías revolucionarias. Con un enfoque colaborativo basado en el intercambio de conocimientos, pruebas rigurosas y un diseño de vanguardia, hemos trabajado con algunos de las mejores y más brillantes mentes para mejorar el rendimiento aquí en la Tierra y más allá.
Nos esforzamos por dar respuesta a todo lo que requieren las operaciones espaciales, desde respaldar las operaciones críticas en el control de misión hasta la lubricación de motores y sistemas de refrigeración de centros de datos en tierra.
Puede sorprenderte, pero cuando se trata de la exploración espacial, la mayor parte del trabajo se lleva a cabo aquí mismo en la Tierra. Tanto si se trata de lubricar componentes vitales en la plataforma de lanzamiento como de optimizar el rendimiento de los equipos de apoyo en tierra, nuestros lubricantes pueden ayudar a impulsar la industria espacial en toda la Tierra y más allá.
Desde los vehículos, las bicicletas y los camiones en la carretera hasta los aviones en el cielo y los barcos en el mar. Desde las máquinas hasta los robots y los objetos de uso cotidiano de los que depende nuestro día a día, Castrol trabaja entre bastidores en muchos más componentes de la vida moderna de los que puedas imaginar.
Más información sobre nuestras colaboraciones en el espacio
Nuestros lubricantes se utilizan en diversas aplicaciones vitales de la Tierra. Lubricamos millones de automóviles, motos y camiones en todo el mundo. Ayudamos a superar los desafíos que presentan las transmisiones de las turbinas eólicas y facilitamos que los robots utilizados en procesos de fabricación funcionen de forma eficiente.
Gran parte de lo que hacemos en el espacio es similar a lo que hacemos aquí en la Tierra. Aplicamos el mismo rigor, experiencia y ética dondequiera que estemos presentes.
Nuestros fluidos de control subacuáticos funcionan de forma fiable hasta 3000 m por debajo del nivel del mar, a presiones extremas y a temperaturas tan bajas como -60 °C. Castrol lubrica válvulas a través de cables umbilicales de 125 km de longitud que conectan la superficie del océano con el lecho marino.
Castrol lleva más de un siglo en el núcleo de la evolución de la industria aeroespacial.
También fuimos la primera empresa en lubricar con éxito un motor a reacción, la primera en desarrollar un lubricante para turbinas de reacción con inhibidor de corrosión y la primera en lubricar un turbocompresor de cabina.
Castrol en el planeta Tierra
Todo lo que hacemos en el espacio influye en todo lo que hacemos aquí en la Tierra.