Las plantas de procesamiento de azúcar operan en horquillas de entre cuatro y seis meses, lo que hace esencial que el equipo funcione sin interrupciones durante esos períodos. Las paradas y averías en las aplicaciones, provocadas por humedad excesiva, altas temperaturas, contaminación, cargas pesadas y largos períodos de operación, afectan a la productividad y, en última instancia, pueden ser costosas.
Nuestros ingenieros de fluidos aplican sus conocimientos y experiencia en lubricantes para desarrollar productos que ayuden a reducir las probabilidades de parada.
Hemos desarrollado productos y servicios para su uso en molinos azucareros, aplicaciones de engranaje abierto, rodamientos, turbinas y cajas de engranajes. Están desarrollados para contribuir a prolongar la duración de los equipos y los períodos entre las comprobaciones de mantenimiento, con el objeto de ayudar a incrementar la productividad.
Nuestros ingenieros de fluidos recomiendan los siguientes productos para sus operaciones: