Los lubricantes de motor diésel Castrol CRB ofrecen una excelente protección a los motores de vehículos comerciales contribuyendo a un funcionamiento eficiente durante más tiempo.
Castrol CRB está formulado para proporcionar un elevado nivel de protección del motor en los intervalos entre mantenimientos, lo que puede ayudarle a evitar paradas no programadas y a minimizar costes de reparación. La gama Castrol CRB está compuesta por:
Semisintético
Mineral
Mineral
Mineral
El hollín se puede aglomerar y formar partículas grandes, que desplazan el lubricante en las superficies móviles de metal y causan abrasión.
Aunque tenga el máximo cuidado, el motor es vulnerable a los daños causados por el desgaste desde el primer día que conduce su camión. Las partículas pequeñas de hollín se atraen entre sí para formar partículas más grandes.
Aunque son 1000 veces más pequeñas que la cabeza de un alfiler, son lo suficientemente grandes como para causar desgaste abrasivo y dañar el motor.
Castrol CRB Turbomax con potenciadores DuraShield trabaja de dos maneras:
Los potenciadores DuraShield forman una capa protectora alrededor de las partículas de hollín más pequeñas, lo que les impide formar partículas abrasivas más grandes. Así se evita que el lubricante se desplace de las superficies móviles y se reduce el contacto entre superficies metálicas.
Partícula de hollín
Partícula de hollín con potenciadores DuraShield
Potenciadores DuraShield evitando la aglomeración de hollín
Castrol CRB Turbomax con potenciadores DuraShield forma una capa protectora sobre las superficies metálicas móviles que resiste la degradación incluso en condiciones difíciles.